Toma de decisiones con Inteligencia Emocional
¿Cuándo debes tomar una decisión te cuesta hacerlo?
¿Puedes identificar las emociones que te invaden a la hora de decidirte por algo importante? Menciónalas.
¿Eres impulsivo a la hora de tomar decisiones?
¿Con que frecuencia aciertas cuando eliges tus opciones? Elige del 1 al 10
¿Te llevas de tus instintos para tomar decisiones?
¿Sueles consultar a varias personas a la hora de tomar una decisión o eliges por si solo?
Tomar decisiones es un proceso que todos tenemos en el día a día a lo largo de nuestras vidas y en todas las áreas. No importa si somos niños, jóvenes o adultos, siempre vamos a tener diferentes opciones para elegir. Va desde lo mas simple como que desayunar, hasta lo mas complicado como con quien nos casaremos, que carrera estudiar o que idea elegir para un proyecto importante. En muchas ocasiones se torna complicado pues en dicho proceso participan nuestros pensamientos y emociones, también nuestras experiencias, conocimientos, nuestra biología, personalidad, temperamento y en muchos casos pueda afectar no solo a nosotros, si no que a otras personas o en caso de decisiones profesionales el desempeño de una empresa. Así como también cuestiones culturales educación, roles y estereotipos, creencias. Lo que debemos saber y tomar en cuenta es que el desencadenante del proceso de toma de decisiones es la existencia de un problema y existe una diferencia entre la situación real y la situación deseada. Casi siempre cuando se nos complica tomar una decisión es porque están en juego dos opciones valiosas y que nunca existe una decisión perfecta o infalible. La habilidad de toma de decisiones puede entrenarse, conociéndonos, identificando nuestros recursos, conociendo y gestionando nuestras emociones, ya que en la mayoría de decisiones que tomamos las emociones toman un papel vital, y practicando dicha habilidad para que cada vez sea mas fácil, mas certero y podamos tomar las opciones mas adecuadas o coherentes con nuestros objetivos y aspiraciones.
Al tener que elegir entre diferentes opciones u oportunidades, algunas fáciles, y otras no tanto puede presentarse el problema de que nos bloqueamos y no seamos capaces de decidirnos por ninguna opción, perder el tiempo y no comenzar a actuar para dar oportunidad de reconocer si la elegida no ha sido la correcta y poder reparar a tiempo dicha situación. Regularmente éste bloqueo se da por diversos miedos que naturalmente podemos experimentar (el miedo es una emoción básica) entre estos esta el miedo a equivocarnos, por no querer renunciar a ninguna opción, miedo a lo desconocido, a lo que podrá pasar, a abandonar una cosa por otra que no conocemos, a perder, incluso a veces tenemos miedos ocultos, por ejemplo a veces tenemos miedo a ganar, porque en nuestro subconsciente cargamos con miedos irracionales por cosas aprendidas en nuestra historia, por ejemplo no tomo una decisión en torno a trabajar por un puesto importante porque tendré muchos compromisos o no podré cargar con ellos. Así que este tipo de pensamientos y emociones nos frenan.
El resultado entonces es el bloqueo, la postergación y la procrastinación, en la toma de decisiones lo que provoca que se paralicen decisiones que son importantes para seguir evolucionando, lo que afecta nuestra vida en lo personal, lo profesional, nuestra estabilidad emocional ya que esto produce angustia, ansias, estados de ánimos bajos, sentimientos de impotencia, de desesperación y uno de los mas importantes el afecto a nuestra autoestima.
Para tomar decisiones deja de pensar en:
No puedo equivocarme o fallar!! Equivocarse es posible, Todos fallamos en algún momento, Incluso a veces es bueno, la manera mas cara pero mas efectiva para aprender es equivocarse y el fracaso no es irreparable, no es permanente, siempre va a existir una salida, y el mejor resultado al fallar es aprender de lo vivido.
Creer que no serás capaz de asumir la responsabilidad o compromiso. En consecuencia perderás la oportunidad y el tiempo. Aquí juega un papel muy importante el autoestima y la seguridad en nosotros mismos.
El miedo a verte expuesto ante los demás. Es tener una amenaza de que los demás te juzgaran, esto genera ansiedad anticipada y es negativo para tomar acción.
Pensar que no tendrás el control de lo que eliges, lo que hace que postergues y genera una angustia, malestar, ansiedad.
Es importante que tomes en cuenta que existen algunos factores psicológicos para que los identifiques y puedas estar consciente de ellos:
Cual es tu estilo de pensamiento, como piensas usualmente, si es en forma positiva, optimista, ves el lado bueno de las cosas o por el contrario eres negativo y pesimista. Esto es esencial para procesar lo que esperas de tus decisiones. Si tus pensamientos son mayormente negativos y pesimistas, tomar decisiones para ti será mucho mas difícil, naturalmente por nuestras memoria biológica y de supervivencia los pensamientos negativos son los primeros que salen a flote a la hora de elegir, ya que nos debemos “cuidarnos del peligro” para sobrevivir. Si a esto le sumas tus tendencia a ver el lado negativo de las cosas, tomar decisiones para ti será generalmente un problema mayor.
Como esta tu autoestima y autoconocimiento, así sabrás la manera de elegir tu estrategias de afrontamiento. Cuando crees en ti, cuando conoces tus recursos, será mas fácil poder gestionar tus miedos, saber que tienes los recursos para afrontar lo que viene, no importa si deberás empezar de nuevo. Cuando tienes confianza en ti lo harás.
Cuando tienes control y autonomía Emocional podrás identificar, aceptar y gestionar adecuadamente tus emociones para que estas no te controlen a ti y las decisiones que tomes. Serás objetivo y realista ante las diferentes alternativas y las consecuencias esperadas o inesperadas. Sabrás que experimentarás miedos, que es normal y hasta bueno. Que tendrás expectativas pero hasta donde lleguen depende de ti.
Las consecuencias de no tomar decisiones
Estos miedos lo que traen es un exceso de minuciosidad y perfeccionismo ya que tratamos de tener todas las bases llenas, tener todo controlado al extremo lo que es imposible y no nos permite tomar la decisión, accionar, lo que genera 0 resultados y un estancamiento.
Por otro lado podemos caer en el abandono, la apatía, la inmovilidad y la creencia de que no queremos o podremos lograrlo. Lo que podría generar dos cosas: uno que en algún momento tendremos que tomar una decisión impulsiva, obligatoria, rápida y fuera de nuestro control y dos en su defecto nunca tomarla y olvidarnos de ver cumplidos nuestros objetivos y sueños. Ambos casos nos llevan a vivir en estados de infelicidad, fracasados y desanimados.
Como tomar decisiones mas inteligente y mejor.
Existen varios métodos y recomendaciones, yo te diría que lo mas importante a la hora de tomar decisiones tiene que ver con conocer cuales son tus necesidades, valores, tus propósitos, tus objetivos de vida, lo que te motiva, tus capacidades y recursos. Así que lo primero y principal es conocerte muy bien. Por otra parte saber que tipo de temperamento tienes y si conoces tus emociones para no actuar desde la emoción sino, poder utilizar tus emociones como fuentes de información y motor a la hora de elegir.
A partir de ahí, podrás hacer la elección sabiendo siempre que si los resultados no salen como esperas podrás elegir nuevamente otras opciones, levantarte y aprender de una manera mas madura, sabia y con una experiencia vivida pero siempre moviéndote a tus objetivos de vida. Lo importante es arriesgarse con todas las evaluaciones de lugar pero tomar la decisión, esto es lo que te permitirá actuar, ver cambios, moverte, el no tomarla te paraliza, te invade de pensamientos, sensaciones y emociones que drenan tu vida y te mantiene en constante desequilibrio emocional.
Te propongo estos 5 pasos para que sea mas fácil tomar decisiones
1. Especifica la importancia del problema que resolverá esa decisión que debes tomando.
Debes ser especifico en esto, cuan importante para tu vida es, es poner en orden de prioridades. Que tanto afecta a tus objetivos, a tu vida dicha decisión. Como afectara a corto y largo plazo. Algunas decisiones tomaran mas tiempo y evaluación que otras. Teniendo claro el grado de importancia tu cerebro se pone accionar mas claramente y activa a tu organismo a tomar acción. Por ejemplo si tienes que mudarte y elegir que sea en una casa o un apartamento, cual es la prioridad que tiene ese problema para tu vida, su grado de importancia. Cuales aspectos son importantes para tu estilo de vida: la zona geográfica, el espacio que tenga, si tienes familia y si te importa lo que piense tu familia al respecto. Si tu economía te lo permite o si prefieres sacrificar tu economía y vivir cómodo, en general saber lo que es mas importa para ti. Reflexiona también sobre el porqué de la decisión ¿por qué debes tomarla? ¿qué pasaría si no lo haces? ¿si las cosas siguieran como hasta ahora y no te decidieras ni te movilizaras hacia ninguna opción cuáles serían las consecuencias?
2. Haz una lista con las alternativas.
Considera TODAS las opciones. A veces estamos entre dos opciones sin darnos cuenta que hay más alternativas, tomando en cuenta el ejemplo anterior, existe otra alternativa de elegir la opción “A la casa en las afueras” frente a la opción B “el apartamento en la ciudad” pero aquí también existe la opción “ninguna de ellas y seguir buscando”.
3. Visualízate en cada una de las opciones.
Para ayudarte a elegir te recomiendo que te veas en cada una de las opciones ¿Cómo me veo en la opción 1? ¿Cómo me hace sentir? ¿Me imagino siendo feliz en ésta opción? ¿Cuáles momentos de paz me dará esta opción? ¿me gustara en 1 año o en 2? Intenta imaginar con todo el detalle que puedas cada opción y cómo te hace sentir.
4. Define un listado de razones o criterios para evaluar las alternativas y pon el peso emocional que tienen para ti cada razón.
En esta parte toma en cuenta las razones o variables de mas relevancia y como repercutirán los resultados en ti, sobre todo a largo plazo. Por otra parte cuales emociones podrán generarte esos resultados, cuando tienes una visión de como te podrías sentir si son resultados que esperas te generara emociones agradables, por su parte si son indeseados a la hora que sucedan te será mas fácil asumirlos. Pon un peso emocional a cada variable en cada opción, por ejemplo el “1” sería que es variable no te importa mucho y “10” que lo consideras muy importante o te mueve emocionalmente.
Por ejemplo, si eliges una casa y sabes que te sentirás feliz porque viviste en una casa toda tu infancia y te gustan los espacios grandes entonces eso tendrá un peso importante para ti. Pero si sabe que igual una casa puede traer grandes gastos económicos y te sentirás preocupado a la larga eso es mas importante para ti entonces sabrás que elegir. Para ello puedes optar entre 1 a 10 variables, en la plantilla anexa podrá servirte de modelo. Al final la opción que tenga mas peso emocional será la que mas tranquilidad y equilibrio te de. Si es posible tómate varios días para hacer la lista, por ejemplo tres o cuatro días, revisa los argumentos el peso emocional cada día y sus puntuaciones y si se te ocurre alguno más lo añades.
5. Ponte una fecha para tomar la decisión
Para esto deberás tomar en cuenta los plazos que tengas para decidir, la dificultad de la decisión, si es prioridad o si esto te esta afectando mucho. Ponte una fecha límite. No te quedes analizando indefinidamente, esto es lo que da paso al abandono o procrastinación. Debes movilizarte aunque no estés 100% convencido que es lo que usualmente pasa, será necesario actuar para avanzar, tomar tu plan de acción, tomar riesgos y comprometerte con una opción.
¿Y si me arrepiento?
¿y si era mejor la otra opción? ¿y si lo otro me hubiese hecho más feliz? No importa, no pasa nada de cualquier manera no podrás saberlo hasta que no tomes la decisión y actúes. Confía en ti, pueden presentarse dificultades en el camino que elijas, confía que si se da el caso harás lo que esté en tus manos para resolverlo llegado el momento. Si te equivocas aprenderás algo, lo afrontarás. Acepta esta posibilidad de que puedan presentarse dificultades, que algo pueda salir mal o que puedes equivocarte, como te dije anteriormente visualiza que sentirías si lo que elegiste sale mal, eso te da la oportunidad de evaluar ese dolor y si pasara será menos difícil para ti. No podemos estar nunca seguros de que las cosas vayan a salir bien, sin embargo podemos confiar en que intentar hacerlo te da la oportunidad de sentirte seguro de ti mismo y orgulloso de que tienes la valentía de tomar acción.
Establecer el compromiso de la decisión tomada es vivir la opción de hacer la rueda girar, no pienses en que hubiese pasado si… no es nada útil y no te deja vivir en el presente. Por otra parte admite que no puedes tenerlo todo, eliges un camino para dejar otro, si surge algún inconveniente o dificultad en éste nuevo camino ya tomarás las medidas para solucionarlo cuando corresponda. Se que tienes la capacidad y los recursos para tomar la mejor decisión siempre y cuando tomes en cuenta tus recursos y tus emociones podrás actuar de la forma mas conveniente para tu vida y la de los demás. Espero que este articulo te sea útiles. Me encantaría que compartas algún otro método o idea que tengas sobre tomar decisiones.
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