Ansiedad ante los cambios, como gestionarla
Al ser humano le cuesta adaptarse al cambio. Al extremo de creerse la expresión “prefiero lo malo conocido a lo bueno por conocer” esto siempre ha sido muy confuso para mi. Siempre he pensado que si no estoy conforme, feliz o no estoy moviéndome a positivo en un estado, debo cambiar ese estado. A través de conocerme, entender aspectos básicos de mi personalidad he entendido porque para mi es tan fácil cambiar (y en ocasiones divertido). Además de mi personalidad sanguínea, en mayor grado, mi historia de haber vivido en tantos lugares diferentes, conocido personas diferentes, eso ha sido una suma de elementos que me han permitido ser flexible a los cambios.
Regularmente lo que produce los cambios en nosotros, es miedo. La autolimitación o barreras mentales que se encuentran basadas en el miedo, por lo que hemos aprendido, especialmente en nuestra cultura. Hemos crecido, en muchos aspectos, limitados a cambiar, a dejar lo seguro y lo que no es diferente. Esto, a mi entender provoca barreras mentales, y es perjudicial a la hora de poder desarrollar una vida plena y llegar a cumplir nuestros sueños, en muchos casos ni siquiera pensar que son posibles.
Quiero que contestes esta pregunta y seas muy honest@ contigomism@ ¿Qué tanto te cuesta adaptarte al cambio? ¿Cómo te sientes cuando tienes que hacer algún cambio en tu vida cotidiana? Piensa en cosas sencillas. El cambio de una ruta al trabajo. El cambio de una posición en tu empleo. El cambio de un colaborador de tu equipo. El cambio de una dirección a la que estas acostumbrad@ a ir. Piensa en tu día a día. Lo que provoca en ti tener que pensar en diferentes maneras de hacer las cosas que haces cotidianamente. ¿Cómo te sientes en torno a eso? ¿Cuáles son tus sentimientos cuando te enfrentas a estos cambios?.
Considerando tu estado emocional ante los cambios, te tengo una noticia que puede hacer cambiar tu ánimo a la hora de buscar tus recursos para promover un estado de bienestar cuando hay que hacer cambios. EL CAMBIO NO VA A PARAR. Hoy más que nunca vivimos en un momento de la humanidad, en el que el cambio es continuo, imparable, exponencial y como vemos, hoy más que nunca impredecible. El cambio es parte fundamental de nuestra vida. Es inevitable. La vida es cambio en su esencia.
Los humanos somos seres miedosos, inseguros y desconfiados. No nos gustan los cambios. Nos generan estrés y frustración. Es algo que viene en nuestra genética, por nuestros ancestros. Cuando se produce algún cambio en nuestra vida, a continuación nace la incertidumbre y desconocimiento, por lo tanto la inseguridad y miedo. Experimentar esos sentimientos nos da terror, sale a relucir el miedo a fracasar. Las personas odiamos fracasar. Por eso casi nadie intenta ir de verdad por sus sueños y con todas las consecuencias que trae. Tenemos miedo a fracasar! Pero lo cierto es que desde el fracaso nace el auténtico y genuino éxito personal. Es la manera mas dolorosa pero mas efectiva de crecer. Las personas exitosas conocen esto a la perfección porque lo han experimentado muchas veces antes de llegar al éxito. Es un tema que menciono en mi articulo “Resiliencia es reponerse aprovechando la enseñanza” el la manera de como las personas resilientes entienden esto a la perfección.
Hemos aprendido a escapar de los problemas, sin saber afrontarlos con la máxima responsabilidad para buscarles una solución que sean beneficiosas para nosotros mismos. Comenzar por esta parte en relación a como nos sentimos cuando existen cambios en nuestro entorno, es la forma más efectiva de agarrar al “enemigo” por la mano y hacerlo mi “amigo”.
¿Como te sientes cuando estas ansioso?
Como ya mencioné la ansiedad es lo mismo que el miedo. El miedo puede provocar en nosotros diversas sensaciones y estados de animo, que pueden perjudicar o bien movernos a la acción a nuestro favor, todo en la medida que nosotros podamos gestionarlo. El miedo puede generar ansiedad que es un estado de profundo malestar, de origen emocional, caracterizado por la presencia de un fuerte afecto negativo juntamente con un alto nivel de activación fisiológica, lo que a su vez tiene un efecto sobre nuestra conducta, la manera como accionamos. Es importante tener en cuenta que en la ansiedad existe una interacción entre un componente subjetivo (lo que nosotros creamos en nuestro pensamiento) lo cual genera estados de malestar. Tiene también un componente fisiológico en el que la emocionalidad genera una serie de síntomas físicos, Y ATENCION AQUÍ, FI-SI-CO, o sea, te enferma el cuerpo.
Cuando la ansiedad te domina te sentirás mas irritable con todo lo que te pasa, tu autoestima es lastimada, no podrás pensar adecuada ni objetivamente, tus pensamientos creativos y positivos se limitan, tienes insomnio y baja calidad del sueño, puedes experimentar fatiga crónica, problemas severos de contracción muscular, malestares continuos del aparato digestivo y cosas así, para no seguir llamando a los demonios. Las personas con ansiedad sienten preocupación constante y exagerada por actividades normales de la vida diaria. Para estas personas cualquier imprevisto, que para otra persona simplemente sería un inconveniente a resolver (una salida, una avería del vehículo, un malentendido con su pareja) puede parecer una auténtica catástrofe y llegar a condicionar de forma grave su estado de ánimo, confianza y seguridad personal. Una preocupación que debería de considerarse normal se termina transformando en pensamientos repetitivos que se mantienen en la mente de quien la padece y acaban descontrolando su estado emocional.
La ansiedad se podría asociar a la alocada vida que tenemos actualmente, misma que nosotros hemos creado. El estilo de vida estresante que hemos adquirido y nuestra deficiente adaptación al entorno. Los cambios inesperados. El miedo al futuro, algunos dicen que la ansiedad es exceso de futuro. Miedo a la incertidumbre de lo que no puedes manejar. Imagínate que en tu trabajo están haciendo reestructuraciones. Te das cuenta que están reduciendo personal por la situación económica global. No sabes lo que te espera, a ti y a tus compañeros de trabajo. Te pones a pensar qué pasara, como harás con tus gastos y deudas, no sabes si encontraras otro trabajo. Todos esos pensamientos de lo que aún no ha pasado generan más pensamientos convirtiendose en un bucle desfavorables para tu equilibrio emocional. Además debo mencionar que existen ciertos tipos de personalidad predispuestas a generar ansiedad, debido a diversos químicos de su cerebro que permanecen alterados en regiones especificas que regulan el sentimiento del miedo. Y por último los genes que portamos, pues según diversos estudios, existen personas propensas genéticamente a la ansiedad.
“La ansiedad en realidad es el arma que posee nuestro organismo para permanecer alerta y avisarnos, cuando nos desviamos de todas las cosas (personas, situaciones, circunstancias y vivencias) que nos hacen bien a nuestro ser, a nuestra esencia”
Tenemos que empezar a hablar de la ansiedad como lo que es, la consecuencia de algo que no hemos estado gestionando bien en el pasado y que nos ha estado causando un malestar interno, aunque no hayamos sido conscientes de ello hasta ahora. Cuando digo algo, me refiero a todo lo que engloba la vida: Relaciones, compromisos, trabajos, hábitos, obligaciones, gestión de la propia vida, problemas, responsabilidades, contratiempos, entre otros. Es decir, se produce una causa, por ejemplo una relación que no nos conviene sostenida en el tiempo. Y como consecuencia de esa perjudicial relación, aparece la ansiedad para confirmarnos que la intranquilidad interior que hemos ido generando poco a poco y alargando en el tiempo sin buscarle solución, ha sido la causa del conflicto producido por la propia relación dañina y su prolongación en el tiempo. La ansiedad aparece para avisarnos que esa determinada relación, no nos conviene. O para advertirnos de que ese estilo de vida agitado y lleno de altibajos emocionales, que mantenemos desde hace tiempo, no nos está haciendo ningún bien.
Por tanto la ansiedad es la confirmación de que debemos cambiar lo que nos esta haciendo daño, no va con nuestra naturaleza o no nos llena. Lo ideal sería darnos cuenta de qué, quién o quienes están siendo los promotores de nuestro malestar interior, antes de que sea la propia ansiedad quien nos lo confirme. Lo cual es un trabajo difícil, que cuesta y nos pone a trabajar, pero que rinde resultados altamente importantes en nuestra vida emocional.
Ahora te traigo la parte buena! La primera cosa que debemos hacer con algo que queremos cambiar, es hacernos conscientes de porque debo cambiarlo. Asumir mi responsabilidad ante este cambio, tomando control absoluto de las acciones a tomar ante ese cambio. Pero asumiendo esta responsabilidad honestamente, sin engañarnos a nosotros mismos.
Para averiguar el motivo de tu ansiedad es necesario que mires hacia dentro y lo hagas desde la calma necesaria. Necesitas paz interior y tranquilidad para poder pensar con claridad. La ansiedad es experta en distorsionar los pensamientos. Para esto, primero tienes que encontrar algo de paz y quietud, para después poder pensar bien. Las respuestas llegarán a ti de forma sencilla, sin necesidad de forzar nada. Si analizas detenidamente lo que está sucediendo en tu vida desde un tiempo hasta aquí, encontrarás las respuestas que buscas. ¡Aprovecha este tiempo de cuarentena es excelente para hacer esto!
1. Comienza a ver el lado bueno de la ansiedad
Te propongo que dejes de estar en su contra y comiences a verla como tu mejor aliada. Si cambias las creencias que tienes con respecto a la ansiedad y empiezas a observarla desde una perspectiva diferente, más a tu favor, la ansiedad pierde todo su poder negativo y se convierte en todo lo contrario. En un gran faro que ilumina tu camino. Pasa de ser la oscuridad que te mantenía desorientad@ y desconectad@ de la vida, a ser la luz que te guía. La ansiedad muere por ausencia del miedo.
2. Comienza a ver los cambios en positivo
El ser humano nunca acepta nada nuevo desde el principio. Necesita antes juzgarlo, conocerlo y cuestionarlo. Ten presente que no eres el/la unic@ que peca de esto. La primera respuesta del ser humano ante algo nuevo o desconocido es el rechazo. Esto es algo innato en nuestra especie. Mi recomendación es que trates de pensar diferente a todos si tu instinto así te lo pide. Actúa siguiendo tu esencia y no el flujo de los demás. Mira lo bueno que trae lo nuevo. Acaricia otras formas de ver las cosas nuevas. Algo que te ayudara mucho a ver lo nuevo diferente es visualizarte en estado idóneo cuando implementes lo nuevo.
3. Deja de vivir de acuerdo con lo que otras personas esperan de ti.
No es responsabilidad tuya lo que otras personas creen que deberías lograr. Puedes tomar el punto de vista de los demás para información y aprovechar oportunidades de mejora, pero no para hacer del punto de vista ajeno el tuyo. Tu eres un ser humano único e independiente. Tus pensamientos, acciones, sentimientos, historia, TU VIDA es única y diferente al resto de la humanidad. No esta atada ni depende de la de nadie mas. Ni siquiera la de los seres mas cercanos a ti como tus hijos, espos@, hermanos, padres. Conoce tus aspiraciones, tus recursos, tu persona y desarrolla una vida que complazca esa persona, esto implica complacerte a ti primero que a otros.
4. Autoconfianza, punto de partida
El primer paso para adquirir la capacidad de hacer algo es creerlo. Si tu mente no está convencida de que puedes hacerlo, lo siento, pero no será posible. Por eso la autoconfianza es fundamental para el éxito en la vida de las personas. Y mucho más para aquellas propensas a la ansiedad. La confianza se genera desde la autoestima o el amor propio. También desde la humildad y la aceptación. Desde la honestidad y la sinceridad. Desde la responsabilidad absoluta de tu propia vida. La autoconfianza se generará siempre desde el amor, la honestidad y la sinceridad hacia uno mismo.
5. No temas a ser y pensar diferente, no pasa nada.
No temas por tener opiniones distintas o más excéntricas que las de la mayoría de personas, pues todas las opiniones que ahora son aceptadas, seguramente alguna vez fueron excéntricas, cuestionadas e incluso rechazadas. En sentido a tu vida, no todos van a estar de acuerdo. No siempre tendrá aprobación, acostúmbrate a ello. Todos tenemos creencias particulares. Tu tienes las tuyas propias. Cada vida es una historia, tu no conoces la de todos, así como todos no conocen la tuya. Así que se autentico, confía en ti. Los demás que se adapten, toma tiempo y puede que te cueste pero es efectivo.
6. Dedica pequeños instantes de relajación durante tu día.
Elige momentos del día en los cuales te relajes intencionalmente. No es nada complicado. Por ejemplo a medio día y antes de iniciar la segunda mitad de tu jornada, o también por la mañana al levantarte y más tarde, antes de dormir, dedica unos minutos a la reflexión y relajación de tu cuerpo y mente. Tírate en tu cama, boca abajo con la cabeza fuera de la cama, por ejemplo. O en el sillón del carro siéntate y relaja cada parte de tu cuerpo, haciendo ejercicio de respiración, mira como hacerlo en Youtube. Sin duda estarás reduciendo el nivel de ansiedad de forma considerable y preparándote de mejor manera para las siguientes horas que te faltan por afrontar. Consiste en dividir el día en varias y pequeñas metas u objetivos.
7. Crea pensamientos alternativos a tus problemas
Hazlo para crear el hábito. La generación de pensamientos positivos es altamente beneficioso para nuestra salud emocional. Para generar pensamientos positivos debes ser intencional en ello. Lo mas recomendable es que cuando se presenten pensamientos negativos reemplázalos con soluciones convenientes para ti. Ante eventos que aun no pasan, pienses en formas alternas de como se resolvería con una solución conveniente para ti. Incluso, te recomiendo que siempre pienses en un plan B y un C. Tendrás una visión de lo que podría pasar, poniendo siempre el mejor de los casos. Acostúmbrate también a pensar en el lado positivo de los resultados aunque no sean los que tu quieres.
8. Realiza ejercicio físico
Me vas a leer innumerables veces recomendándote esto. Es mi segunda cosa mas recomendada, y que mas amo por cierto. El ejercicio físico es beneficioso para nuestra salud general. Es que siempre voy a insistir. Estamos hechos para movernos. Es la manera como nuestro cuerpo se regenera, nuestras células, nuestro organismo. Muévete! Encuentra la forma que se acomode a ti, a tus gustos, a tu naturaleza. Descubre con cual ejercicio te sientes mas cómodo, qué te divierte. Piensa en todo el beneficio que le das a tu ser y comienza ya!
9. Utiliza tus talentos para servir a otros
Lo más interesante del servicio es que cuando lo hacemos beneficiamos a otros y también a nosotros mismos. Ademas que es una recarga a tus energías, a tus talentos, al sentido de la vida y te distrae del foco de pensamientos negativos. Servir con lo que sabes hacer bien te permite exponer y potenciar tus talentos, tus fortalezas. Pero lo mas importante es que puedas con esto ayudar a otros y mas aun, puedes inspirar a otros hacer lo mismo que tu . Servir es un recurso que todos tenemos a la mano, así que utiliza tus recursos para mejorar la vida de los demás y la tuya.
10. Si tu ansiedad se vuelve incontrolable entonces debes pensar en buscar ayuda profesional.
En el caso de que estemos ante un trastorno de ansiedad, estas recomendaciones pueden quedarse algo cortas y suele ser recomendable acudir a ayuda profesional. En caso de que nuestra vida diaria este siendo seriamente afectada por esta condición, que no podamos movernos, que tengamos tantos pensamientos perturbadores que nos impida llevar una vida normal, entonces es recomendable buscar apoyo con personas de nuestro entorno que sepamos que realmente nos pueden aportar y aceptar que necesitamos acompañamiento con un psicólogo, entender que debemos normalizar la salud emocional.
En fin, comienza a ver los cambios como una forma nueva de disfrutar la vida. Te abres a nuevas posibilidades, a nuevos recursos, mueves tu cerebro, experimenta todo lo bueno que la vida te ofrece. Vive tus emociones, siéntelas, disfrútalas y acostúmbrate a buscar el lado positivo de ellas. Cuéntame como manejas la ansiedad. Aporta a los demás dejando tus maneras de manejarla! Vamos anímate a dejar tus comentarios aquí. Recuerda que estoy aquí para acompañarte en tu crecimiento emocional.